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¿Cómo me sentiré?

VENDAJES, DRENAJES Y OTROS INCONVENIENTES

Actualmente las técnicas quirúrgicas han evolucionado mucho y en muchos aspectos. Uno de ellos es la reducción de las molestias en los pacientes.
Anteriormente se había abusado de múltiples técnicas quirúrgicas que parecían adecuadas pero que con el paso del tiempo se ha demostrado que no siempre eran necesarias.
Los drenajes son unos catéteres que se colocan para drenar líquidos del área quirúrgica. Antes eran la norma, pero actualmente con las nuevas técnicas su uso se ha restringido mucho y prácticamente sólo se utilizan en cirugías de alta complicación.
De forma parecida podemos hablar de los vendajes compresivos. Anteriormente pasar por una cirugía cosmética suponía tener que soportar gruesos y pesados vendajes que eran molestos, generaban picor y eran muy dolorosos de retirar. Actualmente su uso se ha restringido muchísimo gracias a los nuevos sujetadores y fajas corporales, y su utilización ha pasado a ser anecdótica.
La actividad diaria también ha sido un mito que ha caído con las nuevas técnicas quirúrgicas. Actualmente se recomienda una reincorporación temprana a la vida normal para una recuperación más rápida. Los tiempos de largos periodos de reposo han pasado a la historia.

ANESTESIA GENERAL O SEDACIÓN

Si las técnicas quirúrgicas han mejorado mucho, lo mismo ha pasado con las nuevas técnicas anestésicas.
Actualmente la recuperación de una anestesia general o una sedación es prácticamente instantánea, y hablamos de unos escasos 5 minutos en la mayoría de los casos.
Después de una sedación el paciente se levanta ligeramente mareado, pero puede iniciar la ingesta de líquidos a los pocos minutos, y el alta también se puede producir de forma rápida.
Después de una anestesia general el paciente se despierta mareado y necesita unas dos horas para recuperarse totalmente. A partir de esas dos horas el paciente se encuentra perfectamente y puede iniciar una dieta progresiva. Con las nuevas técnicas de anestesia general con mascarilla laríngea ya no se intuba a los pacientes, por lo que podemos usar menos dosis anestésica y la recuperación es mucho más rápida, tan rápida que la mayoría puede irse a casa el mismo día.

DOLOR

Muchos pacientes tienen miedo al dolor postoperatorio. Este miedo es infundado ya que existe medicación que lo controla.

Inmediatamente después de la intervención, en la clínica nuestro equipo se encarga de proporcionar toda la medicación analgésica necesaria para que el postoperatorio sea prácticamente indoloro. Cuando se da el alta siempre se pauta una combinación de analgésicos y antiinflamatorios para que en casa el paciente se sienta tan bien como en la clínica.

INFLAMACIÓN

En casi todas las operaciones cosméticas se produce una inflamación. Este síntoma es parte del proceso, y por ello es obligatorio usar las fajas, sujetadores y demás prendas necesarias para reducirlo. Cuando uno se opera es impaciente y quiere ver inmediatamente los resultados, y por desgracia la mayoría de las veces la inflamación enmascara como será el resultado final. Como mínimo siempre es necesario esperar un mes para ver los resultados.
Los antiinflamatorios son útiles durante la primera semana y a partir de entonces la inflamación debe ir remitiendo poco a poco, y solo cabe tener paciencia.
Existen intervenciones como la liposucción o la rinoplastia en las cuales la inflamación puede persistir durante muchos meses. De nuevo sólo repetir que hay que tener paciencia.

SOL

La radiación solar pigmenta las cicatrices. Además la radiación solar sobre un morado puede dejar una marca pigmentada que no desaparecerá nunca más. Antes de tomar el sol después de una cirugía es importante consultar con el cirujano para que valore el estado de la intervención y la necesidad o no de proteger las cicatrices del sol.

RESULTADO FINAL

El resultado final nunca es inmediato. La inflamación, los tejidos y las cicatrices necesitan tiempo para evolucionar. Siempre es necesaria mucha paciencia para valorar los resultados, normalmente estamos hablando de un año para dar por terminado totalmente el proceso de una cirugía.